miércoles, 7 de enero de 2015

Je suis Charlie: atentado contra CharlieHebdo

Hoy, miércoles 7 de enero de 2015, tres hombres armados han atacado la sede parisina de Charlie Hebdo, revista de humor francesa en la misma línea que la española El Jueves. Equipados con armas automáticas, han matado a 12 personas y herido a otras diez.

¿Su crimen? Haber publicado caricaturas satíricas riéndose de la religión musulmana, como ya lo hicieran con la judía y, como es el caso del último número, con la cristiana.

Hoy es un día triste para la libertad de prensa en Francia y en el mundo, para la comunidad musulmana que se ve representada por extremistas sin haberlo pedido, para los cientos de miles de franceses que han crecido con Charlie Hebdo pero, sobre todo, para 12 familias que han perdido a un ser querido que sólo quería hacer pensar y sacar una sonrisa a sus lectores.

Hoy, yo soy Charlie.

Je suis Charlie

Instalarse en Francia: la seguridad social

Tarjeta de la seguridad social francesa
En una entrada previa os hablé de cómo buscar piso. Hoy me adentraré en las indómitas tierras de la seguridad social francesa.

Pongamos que te instalas en Francia y te pillas un virus de los que no se curan con sopa de pollo. Te vas al primer médico que encuentras en las páginas amarillas, quien te ausculta, te receta antibióticos y te saca una factura mientras te pregunta si quieres pagar con un cheque o con tarjeta de crédito. Bienvenido al sistema francés.

Cómo inscribirse

Una de las primeras cosas que tendrás que hacer al llegar a Francia será inscribirte en la seguridad social, o assurance maladie, sobre todo ahora que nuestro querido Mariano nos deja sin derecho a asistencia médica al cabo de 3 meses viviendo fuera.

Si vienes a tierras galas con un contrato de trabajo bajo el brazo, lo primero, muchas felicidades, y lo segundo, puedes saltarte el resto de la sección, ya que es tu empresa la que te inscribirá. El resto de expatriados tendréis que ir a una CPAM, o Caisse Primaire d'Assurance Maladie, e inscribiros por vuestra cuenta. Llevaros lectura porque la fila de espera suele ser larga.

La seguridad social es famosa en Francia por su ineficacia. Puede que pierdan vuestro dosier, que os lo devuelvan porque os faltan papeles que nadie dijo que hacían falta y otras excusas varias. Es normal. La clave de la victoria consiste en tener mucha paciencia y no dejarse amedrentar. 

La CPAM que te corresponda dependerá de tu municipio de residencia. Puedes ver la lista de CPAM en la página web de la seguridad social: Ameli.

Documentos necesarios

  • Tarjeta de identidad o pasaporte (o tarjeta de residencia para los no europeos).
  • Acta de nacimiento plurilingüe o traducida al francés por un traductor jurado (la embajada y los consulados poseen una lista de traducteurs assermentés). Si eres español, puedes solicitar la emisión del acta de nacimiento directamente en varios idiomas.
Derechos y cobertura mínima

Si vienes con trabajo, tienes derecho automáticamente a la seguridad social como cualquier francés. Sin embargo, si vienes a la aventura, al principio no tendrás derecho a nada. Pero que no cunda el pánico: en ese caso no te quedarás sin asistencia médica, simplemente tendrás que solicitar la cobertura mínima llamada "CMU", o couverture maladie universelle.

La CMU puede solicitarse si llevas más de 3 meses viviendo en Francia (justo cuando se acaban los de España, mira qué bien) y te da los mismos derechos que al resto de franceses, sin necesidad de cotizar. Una vez que empieces a trabajar, pasarás automáticamente al régimen general.

Para solicitarla, necesitarás completar el formulario correspondiente en tu CPAM y ajuntar justificantes de residencia en Francia (facturas o justificante de pago del alquiler) y de ingresos (declaración de la renta, justificante de desempleo, etc.).

La tarjeta de seguridad social

Cada vez que vayas al médico o tengas que hacer papeles te pedirán la tarjeta de seguridad social, o Carte Vitale. Esta tarjeta no contiene tu historial médico, sino tu información administrativa para que los médicos puedan cobrar las visitas a la seguridad social.

La tarjeta suele tardar bastante en llegar; hay quien la recibe en dos o tres meses, pero conozco casos en los que ha tardado dos o tres años. Pero no temas, al principio, tras inscribirte en la seguridad social, recibirás tu número de inscripción y un certificado de cobertura con los que podrás ir al médico sin problemas.

Tarifas y sistema de pago

En Francia la seguridad social no cubre el importe total de las prestaciones médicas, sino que sólo paga lo que ellos llaman la "parte obligatoria". Esto suele corresponder al 70 % del precio fijado para cada acto médico. El resto lo pagas tú de tu bolsillo, a menos que tengas una mutuelle privada.

Los precios de las visitas médicas

Los precios dependen del médico. Hay tres tipos de médicos:
  • Convencionados del sector 1: aplican las tarifas mínimas recomendadas por la seguridad social. Para hacerse una idea, un generalista cobra 23€ y un especialista entre 25 y 45€.
  • Convencionados del sector 2: aplican una tarifa un poco más elevada que la recomendada, pero no excesiva. 
  • No convencionados: aplican las tarifas que quieren (y que suelen ser muy superiores a las recomendadas).
En todos los casos, la seguridad social sólo cubre la tarifa mínima. Así, si vas a un médico no convencionado que te cobra 40€ por cada visita, la seguridad social sólo cubrirá el 70 % de la tarifa habitual de 23€.

La página web de Ameli incluye una lista de tarifas habituales.

El parcours de soins coordonné

La primera vez que vayas a ver a un generalista, tendrás que llevar un formulario para declararle como tu médico de cabecera (médecin traitant) y enviarlo a la seguridad social. Si no estás contento con tu médico puedes cambiar de médico de cabecera tantas veces como quieras, pero eso sí, no te olvides de declararlo. Puedes descargar el formulario aquí.

Si necesitas ver a cualquier otro médico especialista, tendrás que pasar primero por el médico de cabecera (excepto en el caso de ginecólogos y oftalmólogos).

Es obligatorio declarar un médico de cabecera y pasar por él antes de ver a un especialista, ya que si no lo haces, se considerá que no has seguido el itinerario coordinado (parcours de soins coordonné) y la seguridad social sólo cubrirá el 30 % del importe de la visita médica en lugar del 70 %.

Cómo pagar al médico

En Francia, la mayoría de los médicos te hacen pagar la visita y luego la seguridad social y/o tu mutua privada te devuelven el importe. Muchos médicos no aceptan las tarjetas de crédito, por lo que te recomiendo llevar dinero en efectivo o una chequera por si acaso.

Feuille de remboursement
Al final de la visita, el médico o su secretaria imprimirá una feuille de remboursement que deberás completar, firmar y enviar a tu CPAM para solicitar la devolución del importe de la visita. Esto puede tardar bastante, de dos a cuatro semanas de media.

Una vez que recibas tu Carte Vitale, el médico la utilizará para conectarse a tu cuenta y enviar directamente la factura a la seguridad social y/o a tu mutua, por lo que no tendrás que hacer nada para que te devuelvan el importe. Además, recibirás la devolución mucho más rápido (entre varios días y dos semanas cómo máximo).

Algunos médicos practican lo que se llama el tiers payant, es decir, que cobran el importe directamente a la seguridad social y/o a tu mutua en lugar de a ti.

Las mutuas privadas

Como ya he explicado, la seguridad social sólo cubre alrededor del 70 % del precio de la visita. El otro 30 % estará a tu cargo, a menos que hayas contratado un seguro privado con una mutuelle.

Por una tarifa mensual que oscilará entre 20 y 70€ al mes de media, la mutua cubrirá la parte de la tarifa que queda a tu cargo. El precio dependerá de tu edad (cuanto mayor seas, más caro será) y del nivel de cobertura que quieras, según si te vale con lo mínimo o quieres opciones adicionales como poder ir a médicos no convencionados, añadir un seguro dental u otras prestaciones.


Con toda esta información ya estás listo para empezar a hacer frente al mastodonte que es la seguridad social francesa. Se me quedan cosas en el tintero, seguro, pero la página web de la seguridad social, Ameli, tiene información muy completa. Y sino encuentras lo que buscas, no dudes en dejar un comentario o escribirme un correo e intentaré ayudarte en lo posible.

    viernes, 23 de agosto de 2013

    ¡Españoles! ¡Toro! ¡Chorizo! ¡Olé!

    Hace poco celebraron en el Carrefour al que voy a hacer la compra la "semana española", es decir, jamón, chorizo, y demás embutidos por doquier, paellas precocinadas hechas para y por franceses que en su vida han probado una paella made in Spain, y vino de garrafón que casi merece ser mezclado con gaseosa como castigo.

    Y, lo mejor, el puesto triunfal a la entrada del súper con maniquí vestido de torero y bandera de Espuña ondeando orgullosa en el aire de los congeladores con aroma a chorizo y lejía.

    La semana española en Carrefour

    Un consejo a los recién emigrados y a aquellos que piensan emigrar: desconfiad de este tipo de secciones "españolas", y pedidles a vuestras madres, padres, y/o amigos que os envíen vuestros productos preferidos desde España. Que aunque el francés se vista de torero, francés se queda.


    lunes, 12 de agosto de 2013

    Pardonnez el título (de la película)

    Hablar de cine en Francia es una ardua tarea, y no sólo porque, vaya usted a saber por qué, a los franceses les encanta el cine francés, si no por la cantidad de veces en las que mencionan películas de las que no he oído hablar en mi vida.

    ¿Recordáis la película más conocida de Todd Phillips, "Very Bad Trip"? Si no, seguro que la mayoría habéis visto la famosa película de Julia Roberts, "Just Married". O el taquillero musical "The Hit Girls". Que sí, que sí, que son películas americanas muy conocidas, seguro que las habéis visto.

    ¿Que siguen sin sonaros? ¿Y si os pregunto si habéis visto "The Hangover"(en España "Resacón en Las Vegas"),"Runaway Bride" ("Novia a la fuga") o "Pitch Perfect" ("Dando la nota")? Ahora seguro que sabéis de qué estoy hablando.

    Póster de The Hangover en francés.

    En realidad, son las mismas películas, pero en su versión francesa, y es que los franceses tienen la extraña costumbre de "traducir" los títulos de las películas de inglés... a inglés. Porque el inglés les suena bien, pero son unos mantas, y "Runaway Bride" pronunciado por un francés acaba dando "ganguey bgaide", que suena más a calle de Nueva Delhi que a divertida comedia romántica.

    No sé cuantas veces me han preguntado si he visto una película, he contestado que no, y cuando me cuentan de qué va, resulta que sí que la he visto, pero con otro título. O al contrario, les pregunto si han visto "Monsters University" y me dicen que no, pero que han visto "Monstres Academy". Bien sûr.
    Póster de Runaway Bride en francés

    Para los curiosos, el tumblr "Pardon My Titres" publica regularmente pósters de películas "traducidas" de inglés a inglés para el mercado francés. Y menudas joyitas que salen.


    lunes, 24 de junio de 2013

    Visto en Montpellier: Zerda

    Zerda: tienda en Montpellier

    Esta tienda, "Zerda", existe de verdad, está en pleno centro de Montpellier y me saca una sonrisa cada vez que paso por delante.

    Y para los curiosos, no, en francés "zerda" no significa nada; sólo les sonaba bien. ¡Si ellos supieran!


    martes, 23 de abril de 2013

    Francia da el sí al matrimonio gay

    Dos chicas se besan frente a manifestantes contra las bodas gays
    Dos chicas se besan frente a manifestantes contra el matrimonio homosexual

    Hoy es día de fiesta y alegría para muchos aquí en Francia, y es que hace unas horas la Asamblea Nacional francesa aprobó por mayoría absoluta el texto que autoriza el matrimonio y la adopción entre personas del mismo sexo, convirtiéndose así en el 14º país del mundo en autorizarlos. El País ha publicado un artículo bastante completo al respecto.

    Meses atrás, cuando se empezó a hablar de la proposición de ley, mi francesito me comentaba lo mucho que le había sorprendido el que España, país católico, apostólico y romano con una derecha tan enraizada, hubiera sido el tercer país del mundo en aprobar el matrimonio homosexual, antes que los países nórdicos, Canadá, u otros países tradicionalmente socialistas. Pero lo que más le había sorprendido, es lo civilizado de los detractores en España frente a la violencia de las reacciones en Francia.

    Durante nuestra discusión, le hablé del clima en España durante los meses previos a la aprobación de dicha ley. Hubo manifestaciones multitudinarias de partidarios y detractores, recogidas de firmas, discursos y debates encendidos, e indignación general por parte de la derecha y la Iglesia católica, por supuesto. Recuerdo la famosa manifestación "por la familia" organizada en Madrid en 2005, como también recuerdo la gloriosa fiesta del Día del Orgullo Gay celebrada unos días más tarde.

    El contraste con el clima actual en Francia es flagrante. Llama la atención que el país de los Derechos del hombre haya mostrado las reacciones más violentas ante esta proposición de ley. Todas y cada una de las manifestaciones contra el matrimonio homosexual se han saldado con incidentes violentos que han requerido la intervención de la policía. La radicalización de una parte de la oposición ha multiplicado por tres el número de denuncias por violencia homófoba (podéis leer la historia de uno de ellos en este artículo de El País). Las amenazas de muerte a diputados se han convertido en su pan de cada día.

    Pero la cosa no se ha acabado con la aprobación del texto. La oposición ha convocado nuevas manifestaciones en los próximos días y exige un referéndum acerca de la ley. Y si bien el referéndum es poco problable, la incitación al odio y a la violencia homófoba sigue siendo palpable.

    Mientras tanto, aquí en Montpellier la alcaldesa se prepara para casar al presidente de la asociación de gays y lesbianas local y su pareja en la que será la primera boda gay del país. Mi francesito y yo pensamos ir, no porque conozcamos a la feliz pareja, que no, si no porque ahora más que nunca es el momento de celebrar la victoria y mostrar al mundo entero que Francia por fin está a la altura de su famoso lema: "Liberté, égalité, fraternité".

    miércoles, 20 de marzo de 2013

    Instalarse en Francia: buscar piso

    Se busca apartamento o casa
    Encontrar un buen piso a buen precio en Francia puede ser difícil incluso para los franceses, y un verdadero quebradero de cabeza en París. Aquí dejo algunos consejos para los que os hayáis decidido a dar el paso pero no sepáis por dónde empezar.

    Tras seis años viviendo en este país he aprendido que lo más importante a la hora de buscar piso es ser paciente. En Francia los inquilinos están muy protegidos y, si deciden no pagar, puede ser difícil echarles del piso, por lo que los propietarios endurecen cada vez más las condiciones de alquiler.

    Lo primero primerito: ¿hablas francés? Si es así, felicidades, tu instalación será mucho más fácil. Si no, intenta buscar a alguien que te ayude, busca un piso compartido con gente que hable francés, o pasa por una agencia inmobiliaria, ya que en Francia sólo se habla francés y la gran mayoría de los propietarios no quieren alquilar a inquilinos con los que no pueden hablar.

    ¿Cuándo buscar?

    El mejor período para alquilar es de mayo a julio, cuando los estudiantes se van. El peor, septiembre y octubre, cuando vuelven, y Navidad, cuando poca gente se muda.

    ¿Puedo buscar desde España?

    Si estás pensando en buscar piso en Francia desde España, olvídalo. Lo mejor es venirte aquí unos días y visitar los pisos en persona, por un lado porque la mayoría de los propietarios prefieren conocer al inquilino antes de alquilar, y por otro porque los anuncios no siempre reflejan fielmente la realidad. También puedes intentar pasar por una agencia inmobiliaria, pero será más caro y suelen pedir garantías que muchos extranjeros no pueden dar.

    Vocabulario básico

    Aquí van algunas cosas útiles que no salen en el diccionario.
    • T1, T2, P3, F4, studio... : Esto indica el número de habitaciones ("pièces") de la casa. En Francia, una "pièce" quiere decir los dormitorios y el salón, pero no la cocina ni el cuarto de baño. Un estudio tiene una sola habitación-salón-cocina, más el cuarto de baño. Para el resto, el número indica el número de habitaciones. Por ejemplo, un T2/F2 tiene un salón, un dormitorio y una cocina (que puede estar integrada en el salón o en una habitación aparte). 
    • Colocation: piso compartido. Aquí se hace mucho (sobre todo en París), lo primero porque es mucho más barato, y lo segundo porque es perfecto para hacer amigos, sobre todo cuando acabas de llegar a una ciudad y no conoces a nadie.
    • CC: Charges Comprises, es decir, gastos incluidos. Estos gastos son la comunidad, la recogida de basuras y la electricidad y limpieza de las zonas comunes, a menos que se especifiquen otros. El resto (agua, electricidad, teléfono, gas) los tienes que contratar tú directamente con las compañías correspondientes cuando te mudes.
    • Honoraires TTC: Comisión de la agencia immobiliaria, que suele corresponder a un mes de alquiler.
    • Dépôt de garantie: la fianza. En general es igual a uno o dos meses de alquiler, aunque no hay máximo legal, por lo que algunos propietarios piden más, especialmente en París. Eso sí, si todo va bien, os la devolverán al dejar el piso.
    • Caution: garantía. A menudo, y sobre todo en el caso de los estudiantes, te pedirán una persona que se comprometa a pagar el alquiler en caso de impago. Esta persona tendrá que presentar los mismos justificantes que el futuro inquilino (cf. sección "Documentos importantes").
    ¿Dónde buscar?

    1. Internet
    • www.leboncoin.fr : equivalente del Segundamano español, es uno de los mayores sitios de anuncios. Puedes clasificar las ofertas de pisos según sean de propietarios privados o agencias, por tamaño, por precio, por fecha, etc. 
    • www.paruvendu.fr, www.seloger.com y www.pap.fr: otras páginas web de anuncios que además publican periódicos gratuitos. 
    • www.lefigaro.fr/immobilier : sección de anuncios de Le Figaro, uno de los periódicos franceses con mayor tirada.
    • www.fusac.fr : France-USA Contact, periódico de clasificados en inglés.
    • www.colocation.fr : la mayor página web dedicada a buscar habitaciones en pisos compartidos.
    2. Agencias immobiliarias

    El lado bueno es que ellas hacen la selección de anuncios por ti, pueden organizarte varias visitas en un mismo día, se ocupan del papeleo con el propietario, por lo que tú sólo tienes que firmar, y en caso de problemas suelen ocuparse rápidamente.
    El lado malo es que es más caro, ya que siempre hay comisiones, y que las agencias de un mismo grupo no se comunican los anuncios entre ellas, así que tendrás que ir una a una.
    ¡Atención! Algunas agencias immobiliarias practican lo que aquí llaman "venta de listas", es decir, ellas no se ocupan de alquilar el piso, sino que te hacen pagar por darte una lista de anuncios y luego tú te tienes que buscar la vida. No lo olvides: las agencias de verdad sólo te cobran la comisión si alquilas un piso, nunca por adelantado.

    3. El boca a boca y los tablones de anuncios de las universidades y escuelas de idiomas.

    Pregunta en tu universidad, escuela o empresa, pregunta a tus amigos, pregunta en foros de internet, dile a todo el mundo que buscas piso. Muchos pisos no llegan a anunciarse porque se los pasan entre amigos, así que muévete.

    Documentos necesarios

    Tres cosas importantes:
    1. A los franceses les encantan los justificantes y documentos oficiales.
    2. La competencia para alquilar un apartamento suele ser brutal, sobre todo en París, y puede que incluso se juegue en cuestión de horas. Por ello, en cuanto veas un anuncio que te interese, llama, pide cita para una visita lo antes posible, y ve con todos los documentos listos por si acaso te interesa, no sea que se te adelanten. 
    3. Todas las agencias y el 90% de los propietarios te pedirán que ganes el triple del alquiler o, con mucha, mucha suerte, el doble (y te pedirán que lo justifiques). Si ganas 1500€ al mes, no podrás alquilar nada que cueste más de 500-600€. Es otra de las razones por las que mucha gente comparte piso en Francia.
    A continuación incluyo la lista con los documentos que se suelen pedir (si eres estudiante, serán los mismos documentos, pero de tu garante):
    • Tarjeta de identidad o pasaporte.
    • Contrato de trabajo o certificado firmado de la empresa.
    • Nóminas de los últimos 3 meses.
    • Última declaración de la renta.
    • RIB (Relevé d'identité bancaire). El RIB es un documento oficial que dan los bancos franceses con toda la información de tu cuenta: nº de cuenta, IBAN, y nombre y dirección del titular y del banco. No es obligatorio, pero las agencias suelen pedirlo.
    • Recibos de alquiler precedentes (últimos 3 meses).
    • Si eres estudiante, un certificado de escolaridad o la tarjeta de estudiante.
    La visita

    En Francia la apariencia es muy importante, así que nada de ir en chándal: ve a ver el piso como irías a una entrevista de trabajo. No olvides que habrá mucha gente buscando piso y todo cuenta para causar buena impresión. Lleva tus documentos limpios y bien organizados en una carpeta que puedas dar al propietario y algo para tomar notas. Prepárate para todo tipo de preguntas: en qué trabajas, por qué vienes a Francia, quién se compromete a ser tu garante, etc.

    Si has llegado hasta aquí, ¡ya estás listo para buscar piso! Ahora sólo te queda ser paciente y convencer al propietario de tu futuro apartamento de que vas a pagar sin problemas.

    Próximamente un nuevo post con consejos para instalarse en un nuevo apartamento.